Anoche fuimos a una de las fiestas más divertidas en las que estuvimos desde que llegamos a Londres.
Se anunció esa misma mañana, Arcade Fire iba a hacer un dj set sorpresa en Shaklewell Arms. Un antro que queda a 20 minutos caminando desde casa, donde generalmente tocan bandas under en un escenario precario decorado a lo centro cultural de barrio. Tiene ese encanto de paredes agrietadas sucias adornadas con murales gigantes, playas pintadas a lo largo del galpón, palmeras que nacen del piso y un espejo que atraviesa uno de los lados, en los cuales se refleja la banda que toca, y la gente bailando, y las manos en el aire, con vasos de cerveza de plástico, mientras algunos intentan hacerse paso entre la multitud, que mueve la cabeza al ritmo de la música, que suena en esa acústica de zótano húmedo.
Sacamos las entradas a la mañana, 6 libras con cintuenta cada uno. En la información del evento no decía nada sobre Arcade Fire, pero si era sorpresa nos parecía lógico.

Cuando salí del laburo a eso de las 10 de la noche fui directamente a Shacklewell. Nico ya estaba ahí junto a Fran y Magui, que están pasando por Londres en un viaje por Europa de 2 meses. Me bajé del tren y caminé hasta ahí. Era una noche linda de verano londinense. Fresquita pero agradable para caminar.
Cuando llegué, había un poco de gente haciendo cola para entrar y los chicos de Arcade Fire estaban en la puerta bajando unos equipos de una camioneta y saludándo amigos. La última y única vez que los había visto, fue 3 días atrás, tocando como una de las 3 bandas mas importantes del Glastonbury, en la Pirámide, frente a 120mil personas. Ahora estaban por el barrio e iban a pasar música para unas... 200 personas?

Mientras hacía la cola, Nico me mandó un mensaje diciendo que no sabía si íbamos a poder entrar porque nuestros tickets eran para el evento anterior que ya había terminado. Cuando me acerqué a la entrada, mostré mi hoja impresa, y ni siquiera la miraron, me entregaron una pulcerita y entré, pensando que como los chicos ya estaban adentro ya no se necesitaba nada más. Pero no. La fiesta no era en el bar, sino adentro del galpón de las palmeras, y no entrabas a menos que tuvieras la pulcera.

Entonces fui con mi celular a mostrarle al chico de la puerta que yo había comprado 4 entradas y no una, pero cuando leyó más detenidamente el detalle de los tickets, me dijo que era el evento equivocado. Volví con las manos vacías y nos quedamos pensando alguna idea para poder entrar. Ya de por sí mi pulcerita me daba 2 vueltas a la muñeca, asíque si cortábamos esta, necesitábamos solamente 2 más. Fran y Magui se levantaron sin dudarlo y fueron hacia la puerta para ver si podían robarle alguna entrada al chico que controlaba los tickets. Tenía un quilombo sobre una mesita al lado suyo, con las pulceras y las hojas A4 que cada uno iba entregando al entrar. Mientras Fran le hablaba para distraerlo, Magui manoteó una pulcera de la mesa. Volvieron orgullosos y contentos diciendo que  solo necesitábamos una más, pero la pulcerita que trajeron estaba bastante arruinada, como despegada en dos capas. Pensamos cómo podiamos emprolijarla para que no llamara la atención pero ninguno tenía nada que pegara. Fran agarró la única vela que iluminaba nuestra mesa, y volcó cera entre las 2 partes que debían estar unidas, Magui desparramó la cera por la pulcera con el dedo, y funcionó mejor de lo que esperábamos.
Al rato se acercó un tipo de seguridad y le ofreció a algunas personas que estaban adentro desde el evento anterior, si necesitaban entradas para la fiesta de Arcade Fire. Nico le pidió 2, así no teníamos que cortar la mía por la mitad. El tipo se fue diciendo que iba a hacer todo lo posible y volvería a buscarnos.

La fiesta empezó y nosotros seguíamos esperando, entonces Nico se acercó otra vez al chico de la puerta, y le insistió que él había comprado más de una entrada. Le mostró en su antiguo celular el ticket pero era tan lento y se veía tan chiquito que el chico intentaba leer la información sin éxito. Trató de buscar en una lista pero como no encontraba el nombre de Nico, directamente lo dejó pasar, creo que le ganó por cansancio.
Nico nos hizo una seña, y finalmente entramos.

El lugar explotaba de gente. Los primeros 5 minutos dudé del éxito de la fiesta. Creí que nos íbamos a ir en media hora al no poder movernos ni respirar ni charlar. Además no sabía exactamente si la música iba a valer la pena solo por ser Arcade Fire...

El cantante tenía puesto un gorro de policía y se tapaba la mitad de la cara con una bandana. Pasaba música serio mientras un grupo de gente lo rodeaba y le sacaba fotos con sus celulares sin parar. El percusionista de la banda estaba a su lado, tocando tambores sobre cada una de las canciones, agregándole ritmos latinos a canciones de hip hop, o acompañando temas brasileros. La música era increíble, y la gente de a poco se fue dispersando. Yo le dije a Magui, "en un rato se van a cansar del cholulaje y solo van a quedar los que realmente queramos bailar..."

Toda la música que pasaron tenía una escencia, la misma que tiene su último disco Reflektor, pero siendo bien bien distinto. Mucho ritmo latino, los ingleses no entendían nada, y nosotros bailábamos como si estuviéramos en la bailanta. Pero la gente estaba cada vez más copada con lo que estaba pasando, y se involucraba con la fiesta, disfrutando de todos esos sonidos. Arcade Fire les dio a todos una lección de música bailable esa noche.

Me dio un poco de lástima que no los trataran a ellos como simples pibes que estaban pasando música copada en Shacklewell Arms. Me hubiera gustado que no vieran tantos celulares sobre sus caras y pudieran bailarse una cumbia con nosotros al final de la noche.
Estuvimos al borde de la Mona Gimenez varias veces. decir que no la pasaron, sino hubiera sido un descontrol :p