Recent Posts

miércoles, 11 de febrero de 2015

Entonces un día no dio para más.
Cuando volví a Quaglinos después de trabajar algunos meses en Le Pont de la Tour sentí claramente que mi tiempo ahí todavía no había terminado.
Ahora sí terminó.
No me arrepiento. No considero tiempo perdido las horas agobiantes de estrés y negatividad. Me llevo algo conmigo de todas las situaciones con las que pude lidear, y con mis decisiones, con mi supuesta piel fina y débil que me lleva por el mundo, con-tacto directo con la aventura y el amor.
Soy libre y soy fuerte en mi mundo propio donde yo soy creadora y culpable siempre. Y si lloro es de lo grande y misterioso del destino.
Lo que nadie sabe ahí adentro, es que sí. Que cada cosa que experimenté y aprendí siendo recepcionista me alimentó como artista.
Tal vez una de las lecciones más importantes que me llevo es que está en uno ser alquimista.
Cada uno tiene la libertad de transformar lo que recibe, en lo que quiera.
Después de Quaglino's soy más fotógrafa, más creativa, más directora, más productora y más poeta.
Tal vez no sea el camino más directo a mis metas, pero es un camino.
Y con orgullo lo comencé y con orgullo lo desvío.
Se que cuando mi jefe me escuchó renunciar, vio en mis ojos algo que no conoce.
Me recomendó con superficialidad hacerme más fuerte.
Y yo sonriendo dije "no, pero gracias igual"

Dos días atrás alguien me dijo "Renunciá, vos podés." Y después me esperó en Dalston Kingsland con una quilmes para brindar en la vereda.



0 comentarios:

Publicar un comentario